Cuando nada es lo que parece: Trastorno Disocial

Seguramente conoces algún niño o adolescente, que casi siempre en la escuela buscaba la pelea sin razón,  no entraba a  clases por irse con los compañeros a pasear, solía hacer bromas  e incluso se ponía insolente con los maestros,  puede que a veces alguno si podía pedir disculpas pero otros no muestran ni pizca de arrepentimiento.

Desde pequeños se puede evidenciar conductas, en ocasiones que los niños pueden ser severamente castigados por lo padres o tutores debido a las reiterativas llamadas de atención, o bien esta conducta  puede pasar desapercibida hasta que las cosas se complican. En la consulta es frecuente que las madres acudan a buscar ayuda después de que su hijo fue detenido por la policía, o porque el menor fue expulsado del colegio. Esta situación es muy compleja, una lucha interna por hacer lo correcto pero a la vez disfrutar del riesgo, de la hazaña, del ego.

Estas descripciones son sólo el preámbulo para poder explicarles sobre  la importancia de detectar tempranamente estos síntomas y poder buscar ayuda oportuna en estos casos.

El Trastorno disocial es un conjunto de conductas  persistentes de comportamientos que evolucionan con el tiempo , se caracteriza por comportamientos en contra de la sociedad que violan los derechos de otras personas, las normas y las reglas adecuadas para la edad. Los cuales inician generalmente en la infancia o la adolescencia  y pueden mantenerse durante la adultez, incluyen las agresiones a personas o animales, la destrucción de la propiedad privada, estafa o robo y las violaciones graves de las normas del grupo de referencia, de los cuales al menos tres se han realizado en el último año y uno en los últimos seis meses, generando un deterioro significativo en la vida académica, escolar y/o laboral del individuo.

Pueden asociarse al tipo de dinámica familiar, acoso escolar. Estas personas tienden a presentar mayor fracaso académico, problemas escolares y otras dificultades que pueden incidir negativamente en su salud física, psicológica y sexual, como el uso más precoz y frecuente de alcohol y drogas, trastornos por uso de sustancias, intentos suicidas, problemas legales, malas relaciones con pares y adultos, promiscuidad sexual y embarazo no deseado .

FUENTE: APA, 2013; Baker, 2008; Harrington & Maskey, 2008; Hill, 2005.